Caminito del Rey
A sólo 15 minutos en coche de nuestra finca, puede visitar el mundialmente famoso paseo del Caminito del Rey.
El Caminito del Rey se extiende desde Álora hasta Campillos a través del desfiladero de El Chorro. Se trata de una de las rutas de senderismo más vertiginosas del mundo, para la que hay que reservar entradas, con o sin acompañante. El sendero está muy concurrido, por lo que se debe reservar con tiempo si se quiere visitar este increíble fenómeno.
Puede reservar estos billetes a través del sitio web oficial >> https://reservas.caminitodelrey.info/.
¿Qué es exactamente el Caminito del Rey? He aquí una breve explicación:
El Caminito del Rey es una hermosa ruta con gigantescos acantilados (400 metros de altura). El recorrido es de unos 3 kilómetros y termina en El Chorro. De principio a fin unos 10 km en unas 3,5 horas. No se debe caminar con lluvia y/o viento. A partir de los 8 años se puede hacer la ruta a pie. El Chorro se puede traducir como lo que el agua encontró al recorrer el desfiladero. En 1866 se construyó la conexión ferroviaria Córdoba-Málaga; 192 km, 17 túneles, 8 viaductos y 18 puentes. La conexión se detiene en el Chorro (Caminito del Rey). El Camino del Rey fue utilizado por los trabajadores para transportar el material de construcción entre los dos lugares de instalación. Las obras de las instalaciones comenzaron en 1901 y se terminaron en 1905, que se inauguró a bombo y platillo. La central eléctrica de El Chorro comenzó a producir electricidad ese mismo año, pero a pesar del progreso tecnológico e industrial que supuso, el puente sobre el desfiladero a una altura espectacular entre las dos paredes rocosas llamaba más la atención que las propias instalaciones. El nombre de Los Balcones fue dado a este puente que cuelga a 100 metros del suelo. Fue diseñado por Rafael Benjumea y su equipo de expertos, entre los que se encontraban muchos marineros acostumbrados a trepar por las cuerdas y a trabajar sobre un gran vacío. 1921 El rey Alfonso XIII inaugura la presa del Chorro (embalses del Guadalce-Guadalteba) y el Caminito del Rey. Posteriormente, el camino fue modificado con arena y cemento y reforzado con tirantes metálicos. Se colocó una barandilla de hierro como soporte. Debido al deterioro, el Caminito del Rey se cerró en 2001 y desde entonces se han producido varias muertes. A pesar de los numerosos accidentes que se produjeron en los años siguientes como consecuencia de diversos paseos ilegales, los traicioneros giros del "camino del Rey" siempre tuvieron un efecto mágico. Aventureros de todo el mundo acudieron al sur de España para adelantarse a la amplia renovación del sendero prevista a partir de 2013. La renovación del Caminito había sido un punto de discusión durante años, pero en 2013 el gobierno finalmente dio el visto bueno. Las autoridades locales de Málaga destinaron nada menos que 5,5 millones de euros a este proyecto. Al final, se gastaron 2,2 millones de euros en la construcción del nuevo Caminito, y el resto se empleó en las instalaciones circundantes, como carreteras, aparcamientos y paradas de autobús. Se calcula que hasta 250.000 personas visitarán el Caminito en el primer año, creando 180 puestos de trabajo y un volumen de negocio de 20 millones de euros. Es una de las mayores atracciones de Andalucía, si no de toda España. 2015 tras un año de trabajo en la seguridad del Caminito del Rey, se reabre.
Así que este paseo único no se lo puede perder.
Algunas cosas importantes si quieres visitar el Caminito del Rey:
- Si viene con niños, tenga en cuenta que los menores de 8 años no tienen acceso al Caminito del Rey.
- En caso de lluvia ligera el Caminito del Rey permanece abierto pero no se permiten los paraguas. En este caso es mejor llevar ropa de lluvia.
- Se ruega llegar 30 minutos antes de la hora reservada para la organización de los grupos.
- Le recomendamos que lleve al menos los siguientes elementos: agua, crema solar, algo de comida y calzado para caminar.
- La caminata dura unas 3 horas, después de las cuales se puede regresar en autobús al punto de partida.
